Herrerilo común defendiendo su territorio

Estando anillando una mañana, sin darnos cuenta aparcamos el coche en el territorio de una pareja de herrerillos comunes, cuyo macho habiamos anillado en otra ocasión, despues de varias horas tuvimos que quitar el coche, pues el macho no paraba de pelearse con su propia imagen en el espejo retrovisor.